¿Te ha pasado alguna vez que has deseado que el día tuviera más de 24 horas? A mí sí. En mi caso se debe a que quiero realizar muchas tareas en el tiempo libre dispongo sin perder horas en las tareas importantes como son estudiar o trabajar.

En mi tiempo libre trato de hacer muchas cosas y me organizo para ser capaz de dedicarle un ratito a cada una de ellas. Dibujar, es una. Ya he hablado de lo esencial que es tu hora de dibujo, pero cuando quieres hacer más cosas, o algo más grande, una hora es muy poco tiempo.

El fallo de querer hacerlo todo a la vez

Dibujar es algo que lleva tiempo. Yo lo sé, y lo tú sabes. En dos días no se aprende a dibujar, y en una hora no se puede hacer una obra maestra.

A raíz del blog y del tiempo que consume, decidí a recurrir a la multitarea en mi día a día. Al principio me fue muy bien, e iba cumpliendo con mis objetivos en el plazo que me proponía. Tenía tiempo para trabajar, dibujar, y cualquiera de mis proyectos. Pero poco a poco. Pequeñas interrupciones, trabajos que requieren más tiempo del que esperas, y momentos de baja productividad, han ido afectando al buen devenir de las cosas.

Al final me di cuenta de que la multitarea me permitía hacer muchas actividades a lo largo del día, pero no conseguía terminar ninguna.

Muchas de las cosas que hago requieren mucho tiempo como puede ser hacer un cómic, realizar un encargo, o estudiar un conocimiento nuevo. Por eso estoy viendo que la multitarea no me está beneficiando tanto como esperaba.

No quiero decir que la multitarea sea algo malo, realmente es muy buena porque haces muchas cosas dedicándole un poco de tiempo a cada una. Pero precisamente ése es su talón de Aquiles. Con muy poco tiempo, los proyectos más largos no avanzarán apenas nada. 

Dibujar una hora al día está muy bien si quieres practicar tus habilidades, pero necesitas mucho más tiempo para avanzar en tus proyectos. Por mucho que lo intentes, si por ejemplo pretendes hacer un web cómic, dibujando una hora al día te va a resultar muy difícil alcanzar tus plazos (a menos que dibujes cyanide and happiness)

Pongo un ejemplo con un videojuego: ¿No te ha pasado nunca que te obsesionas con uno, y cada vez que puedes, dejas todo lo que tienes que hacer para poder dedicarle todo el tiempo posible al el? Y así, día tras día, le dedicas todo tu tiempo de ocio, y no paras hasta terminarlo. El juego te consume mucho tiempo y esfuerzo, pero al final lo completas. Te sientes satisfecho por haber sido capaz de terminarlo, y gracias a la cantidad de horas al día que le has dedicado tan sólo te ha llevado una semana completarlo. Entonces vuelves a tus proyectos, hechas la vista atrás y acabas con un sabor agridulce porque, aunque estás contento de haber terminado el juego, te das cuenta de la semana que acabas de desperdiciar. Ahora tus sueños llegarán una semana más tarde. ¿Te resulta familiar?

La Monotarea

Lo opuesto a la multitarea sería trabajar “fulltime”. Esta otra opción te permite avanzar más rápido y más concentrado, y además, los avances se notan mucho más. Dedicándole más tiempo de lo normal a tu tarea, consigues que resulte más fácil darse cuenta de los avances que haces, y el resultado de ello es que resulta más fácil mantenerse motivado.

Marcarse un objetivo claro y trabajar en él, es la clave de la monotarea. Mientras más realista sea el objetivo mejor. Puedes realizar algunos retos, o puedes intentar hacer un proyecto.

Los artistas sabemos que lamentablemente la calidad y la velocidad no se llevan bien. A todos nos gustaría ser capaces de hacer el trabajo de 10 horas en 1, pero sólo Doraemon ha conseguido eso. Cuanto más detalle tenga la obra, más horas hay que dedicarle.

Hay artistas que han dominado un estilo que les permite alcanzar un notable nivel sin tener que dedicarle excesivas horas (samichikan y su obras realizadas en 3 horas), pero seamos realistas, sin el nivel suficiente, marcarse un objetivo así sólo te frustrará y desmotivará.

Lamentablemente, el resto de mortales debemos de elegir si ser buenos o rápidos, pero no ambos. La multitarea no es buena compañera de la calidad, así que si lo que buscas es calidad, comienza a dedicarle más de una hora a dibujar.

50/50

Tal vez la mejor solución sea una combinación de ambas. Dividir tu tiempo en dos partes. Uno para lo que consideres más importante, como dibujar, al que le dedicas la mayor parte del tiempo; y la otra parte dividirla en subtareas. De este modo cada día le dedicas mucho más esfuerzo a la tarea importante en vez de dedicarle poco.

Pero al final, eres tú el que tiene que probar y descubrir cual es la formula de mejor te funciona. Tal vez tienes la suerte de ser bueno y rápido, o tal vez se cansa dibujar más de una hora seguida. Lo importante es que encuentres un hueco en tu horario y trates de incluir el mayor número de horas posibles en el. Sólo así conseguirás tus sueños más grandes.

¿Y tú, haces muchas tareas al día?